Preparar la piel para afrontar la Navidad y protegerla frente a los excesos
El exceso de comidas, dulces…, así como ingerir alguna copa de más de alcohol, todo ello unido al estrés que provocan estos acontecimientos navideños y la falta de sueño por los distintos festejos durante estas fechas, pasan factura a la piel, especialmente a la del rostro. Estos abusos y la pérdida continuada de la rutina en las horas de descanso, pueden provocar que, al final de las fiestas, el rostro tenga un aspecto apagado, con ojeras mas marcadas e incluso aparezca acné o arrugas.
Según explica el doctor Beltrán Carrillo, una mayor ingesta de alcohol y de azúcar, que se pueden producir durante estas fiestas, afecta negativamente a la producción de colágeno y elastina de la piel, al igual que ocurre al trasnochar de manera frecuente. Como consecuencia es muy común la deshidratación y la falta de brillo y luminosidad.
Por este motivo, para poder disfrutar de las vacaciones de Navidad sin que la piel pague las consecuencias, el doctor explica que es recomendable cuidarse e intentar controlar dichos excesos, pero si es posible, también es conveniente someterse a tratamientos que la protejan, ayuden a mantenerla sana y prevenir su envejecimiento prematuro.
En este sentido explica que una de las técnicas más efectivas, es la inserción localizada de agujas de acupuntura en el rostro, pero matiza que ésta siempre debe ser realizada por un médico experto, para que sea segura y efectiva. Según el doctor la colocación de forma indolora de la aguja de acupuntura produce una micro-lesión que estimula al sistema inmunitario y al de reparación de lesiones induciendo la formación del propio colágeno y elastina que atenúa las arrugas. Además, mejora la circulación sanguínea local, aumento del contenido de agua y aceites, el potente efecto antiinflamatorio, la estimulación de la telomerasa que protege a los telómeros del DNA de las células, permitiendo mantenerse jóvenes durante más tiempo y el efecto sobre las células del tejido conectivo, principalmente fibroblastos y mastocitos, para producir colágeno y elastina en cantidad y calidad más adecuada.
Como consecuencia se producen beneficios estéticos que van desde la mejora del color, elasticidad, textura, brillo y tono, hasta la disminución de edemas faciales, la reducción en la profundidad y extensión de las arrugas, la disminución del hundimiento alrededor de ojos y la despigmentación de las ojeras o las marcas de acné.
El doctor advierte que un tratamiento facial con acupuntura es muy eficaz, aunque comenta que sus efectos variarán dependiendo del caso y la situación de cada paciente, al que siempre hay que saber adaptarse. Y es que su colocación no sigue siempre la disposición de los puntos tradicionales de acupuntura, sino que dependerá de la constitución y a las alteraciones de la piel, así como a las necesidades especificas de la persona.
En cuanto a sus resultados, estos son inmediatos. “Con una sesión, cuya duración suele ser de aproximadamente 30 minutos, se consigue un aspecto más luminoso y resplandeciente, mejor color y aspecto general. Para un tratamiento completo antienvejecimiento es conveniente comenzar con una sesión semanal de 5 a 10 semanas, continuándose con sesiones de mantenimiento que serían una sesión cada 3 o 4 semanas”, afirma Beltrán Carrillo.
Dependiendo de la repetición del tratamiento se conseguirán otros beneficios como combatir la caída de pómulos, párpados o cejas o la reducción de arrugas de expresión, incluso las mas marcadas, dando a la cara un aspecto más joven, terso, pero con un aspecto natural y propio, al contrario de lo que sucede con algunas técnicas quirúrgicas o de relleno y toxinas botulínicas que dejan un aspecto similar a todas las personas tratadas por ellas.
Además de efectos inmediatos, la acupuntura no es dolorosa, no presenta efectos secundarios, ni requiere periodo de recuperación. Tampoco deja ningún tipo de marca, ni siquiera al quitar las agujas, ya que la técnica que se emplea en la acupuntura estética a nivel local varia discretamente con respecto a su uso general. Al ser la piel de la cara más fina y delicada se tienen que utilizar agujas más finas y cortas.
Acerca del Dr. Beltrán Carrillo
Licenciado en Medicina y Cirugía por la Universidad Complutense de Madrid, el Dr. Carrillo se especializó en Geriatría aunque, por tradición familiar, terminó decantándose por el ejercicio de la Acupuntura, en la que es Magíster por la misma Universidad. Tras trabajar como geriatra en el Hospital Central de la Cruz Roja, en Madrid, abrió consulta privada de Acupuntura Médica y Geriatría en 1993.
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