Artículo de Opinión
Enero 2006

La excelencia no es un resultado, es una actitud

Gonzalo Martínez de Miguel, director general de INFOVA, Instituto de Formación Avanzada, define la excelencia como “dar el cien por cien de tu capacidad en cada momento”, es decir, hacer en cada momento lo mejor que podemos y sabemos hacer.

El gran reto de la dirección de personas ha sido desde siempre conseguir que un equipo de profesionales aporte, de forma continuada, lo mejor que tiene a favor de un proyecto. El gran reto ha sido y es conseguir la excelencia.

Martínez de Miguel diferencia, así, la excelencia como resultado de la excelencia como actitud, ya que como él mismo dice, “no estoy hablando de la excelencia como resultado, en cuyo caso sería excelente aquel resultado que sobresale positivamente entre otros resultados de la misma especie; sino de la actitud con la que hacemos las cosas. Por lógica, si haces lo mejor que puedes, el resultado será el mejor de los posibles para ti”, es decir, excelente.

El director general de INFOVA opina que “la excelencia no depende de las circunstancias, depende de nosotros”. Esto se explica porque, como otras actitudes, la excelencia se puede elegir. Esta elección puede ser consciente o inconsciente, lo cual dependerá del grado de información que tenga cada persona. “En la mayoría de las ocasiones las personas sin una información adecuada al respecto eligen sus actitudes de una forma espontánea, en función de las condiciones en que se encuentran, lo que en términos de empresa se llama actuar de forma reactiva: es una reacción a lo que ocurre en su entorno, reaccionan a sus circunstancias”.

Sin embargo, las circunstancias que nos rodean no deberían determinar nuestra excelencia. En concreto, en el ámbito empresarial, mucho del trabajo de un directivo consiste en “crear las condiciones para que te resulte fácil elegir una actitud de excelencia”, su responsabilidad es “crear las mejores condiciones para facilitar la elección de excelencia de sus colaboradores”, teniendo en cuenta que la elección final es personal.

Continúa Gonzalo Martínez de Miguel hablando de la información, ya que “con la información adecuada las personas toman conciencia de que pueden elegir y cuando se dan cuenta de esa posibilidad empiezan a elegir la excelencia como actitud” porque comprenden las ventajas que les aportará. Es lo que el director general de INFOVA llama el “Principio de elección, que está en algunos de los procesos que más preocupan a los directivos y profesionales, como es el proceso de motivación, el proceso de gestión interna del cambio y tantos otros”.

Martínez de Miguel cree que cuando estamos más pendientes de los resultados que de dar nuestro cien por cien empezamos a juzgarnos o a juzgar a otros por la falta de resultados empezamos a juzgar lo que deberíamos haber hecho y no hicimos, empezamos a buscar culpables o a reprocharnos nuestra incapacidad, lo cual genera toda una serie de efectos negativos añadidos a la falta de resultados. Para evitarlo, Gonzalo Martínez de Miguel propone “analizar honestamente si lo que hiciste fue lo mejor que supiste y pudiste hacer en ese momento, con la información que tenías y en las circunstancias en que te encontrabas, y si tu respuesta es que sí hiciste lo mejor que pudiste, olvídate del resultado, hiciste un trabajo excelente. Si tu respuesta es “no”, reflexiona sobre qué puedes aprender para la próxima vez”.

INFOVA, Instituto de Formación Avanzada, es una empresa especializada en la formación de profesionales, que aplica su metodología en tres áreas distintas, pero a su vez complementarias: Formación en Sala, Formación a través de la Experiencia (Outdoor Training) y Formación On-Line (E-learning). Su objetivo es ahondar en las causas que inspiran los comportamientos y así poder realizar cambios reales, proporcionando de esta forma herramientas capaces de fomentar y potenciar el desarrollo profesional de directivos, redes de ventas y equipos de trabajo.

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