Cuánto deporte es salud y cuánto obsesión

La actividad física beneficia hasta el punto de poder retrasar la aparición de enfermedades como el Alzheimer, pero puede crear también trastornos como la vigorexia o desajustes metabólicos

Últimamente proliferan en las ciudades gimnasios, carreras populares, grupos de patinadores, ciclistas o corredores, aparecen nuevas actividades para mantenerse activo y cada vez somos más conscientes de los beneficios que aporta la actividad física y de cómo esta, nos ayuda desconectar del día a día, a combatir el estrés y frenar el envejecimiento.

Todo nuestro cuerpo se beneficia con el deporte, porque cuando lo practicamos liberamos endorfinas, que nos ayudan a relajarnos y a sentirnos felices, y de ahí la sensación de bienestar tras realizar ejercicio. “Esto unido a los efectos que tiene sobre nuestra imagen, deja claro que el deporte, sea cual sea, desde prepararse para un maratón a caminar media hora al día, es un gran método para mejorar nuestra salud, nuestra autoestima y confianza” afirma la doctora Marisa Navarro, autora del libro “La medicina emocional”.

Se puede confirmar que además de combatir la obesidad, aumentar nuestra fuerza y mejorar el estado de nuestros órganos y músculos, lo que nos protege frente a problemas físicos, mantenerse activo es también una prevención contra trastornos psicológicos como la depresión, la ansiedad y el estrés, así como para las alteraciones del sueño, entre otros. Pero más allá de esto, Marisa Navarro explica que la concentración, el mejor funcionamiento intelectual y el desarrollo cognitivo que provoca su práctica, es una ayuda para luchar contra enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer o la demencia senil, y otras como la diabetes, los accidentes cerebro vasculares, la osteoporosis y el cancer, así como para frenar el envejecimiento de nuestro cerebro y de todo nuestro organismo.

Sin embargo, el deporte mal entendido o practicado, también puede poner en riesgo nuestra salud, produciendo lesiones físicas más o menos graves, el desarrollo de obsesiones o depresión, explica la doctora. Los casos en los que el deporte se vuelve un peligro más que un aliado serían según explica:

– Cuando le dedicamos todo nuestro tiempo libre, descuidando otras actividades, en cuyo caso puede llegar a producir, vigorexia que es un trastorno asociado a la adicción al ejercicio físico y a su práctica de forma compulsiva, de manera que las personas que lo sufren, además de ser más propensos a sufrir lesiones, tienen una visión distorsionada de su cuerpo y suelen tener baja autoestima.

– Cuando nos centramos sólo en el beneficio estético, y es que acudir al gimnasio solamente con la intención de querer ser delgado, usar una determinada talla o estar supermusculado, buscando un modelo corporal concreto y basado en una estética determinada es un error, que acaba haciendo que te compares con otros y te sientas mal. Hay que asumir que cada cuerpo es diferente, con una estructura ósea, unos músculos y un metabolismo determinado, no hacerlo puede llegar a generar un trastorno conocido como la dismorfofobia, que lleva a obsesionarse por defectos que percibimos en nuestra imagen corporal, ya sean reales o imaginados.

– Cuando la actividad no concuerda con nuestras capacidades. Realizar ejercicio por poco que sea es bueno para nuestra salud, y no hace falta ser un deportista de élite para notar sus beneficios, pero no realizar un deporte acorde con nuestras capacidades o fijarnos entrenamientos o metas muy altas, hace que tengamos más posibilidades de fracasar, lesionarnos o abandonar, no siendo capaces de generar este hábito tan saludable, lo que en consecuencia afecta a nuestro estado de ánimo y autoestima.

– Cuando no aceptamos que una lesión nos impide desarrollar el deporte que nos gusta o cuando las marcas, las metas o los entrenamientos ya no son o tienen la misma intensidad que antes, y esto nos hace sufrir y lleva incluso a muchas personas a la depresión, como vemos en algunos atletas de élite, cuando finalizan su carrera deportiva. Para que no ocurra, hay que cambiar el punto de vista, y ver el deporte como salud, no como competición, pensando que en cada momento, edad o circunstancia podremos realizar un tipo de ejercicio físico, que es el que mejor nos va a sentar.

– Cuando pensamos que por haber hecho algo de deporte, tenemos vía libre para atiborrarnos y no cuidar nuestra alimentación u otros aspectos de nuestra vida. El deporte tiene que estar acompañado de una alimentación equilibrada y saludable, y es que no se trata de perder calorías por un lado, para ponerlo como excusa e ingerir demasiadas grasas, azúcares o alimentos procesados por el otro, porque las malas prácticas alimenticias acaban degenerando en alteraciones metabólicas y hormonales.

Sobre la Autora:

Doctora en Medicina por la Universidad de Alicante, realizó el doctorado en el área de Salud Comunitaria en el Departamento de Psicología de la Salud, versando su tesis sobre la depresión. Especialista en Trastornos del Sueño e Hipnosis Clínica, por la Universidad Complutense de Madrid, también ha realizado un máster en Gerontología y Salud por la Universidad de Alicante.

Desde hace más de veinte años ejerce como médico psicoterapeuta en su consulta de Alicante, dónde ha atendido a más de dos mil quinientos pacientes. Además, la Dra. Marisa Navarro es profesora, conferenciante, comunicadora y ponente en universidades, foros de salud.

Ha publicado artículos en revistas científicas de ámbito nacional e internacional y habitualmente colabora en espacios de salud de medios de comunicación, entre los que destacan La Mañana de Televisión Española o Radio Inter. Recientemente ha lanzado al mercado su primer libro “La medicina emocional”, en el que se expone el concepto de cómo los pensamientos y los sentimientos afectan de manera positiva o negativa en la salud, desarrollando un conjunto de técnicas y de tratamientos aplicados al cuidado de las emociones para gozar de mas salud, prevenir enfermedades, ser mas felices, y disfrutar mas de la vida.

Persona comprometida y solidaria, ha sido presidenta de la ONG Medicus Mundi en la Comunidad Valenciana, durante más de diez años.

Para más información:

Recursos de Mercado – Gabinete de prensa de la Dra. Marisa Navarro
Tlf: 91 547 08 04

 

 

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