Comunicado de Prensa
16 de Octubre de 2007

Recibir la imagen de la persona que pulsa el timbre en una pantalla en el salón; observar el interior de la vivienda a distancia mediante una cámara e Internet; acceder al sistema eléctrico y a los electrodomésticos por control remoto; disponer de sistemas electrónicos exteriores que analizan la climatología y dan instrucciones para el encendido o apagado automático de los aspersores del jardín, para desplegar por sí solos los toldos de las ventanas si hace sol, o cubrir la piscina de forma automatizada con una lona si llueve…

Estas tecnologías ya son posibles y muchos expertos consideran que constituyen la base de la “casa del futuro”. Los grandes laboratorios científicos y grandes empresas tecnológicas nos hablan sobre las “casas inteligentes” y algunas, como es el caso de la de Bill Gates, ya han sido construidas. Mucho se ha hablado acerca de cómo ha de ser una vivienda futurista desde el punto de vista tecnológico pero, en este contexto, cabe plantearse: ¿Cómo han de ser los materiales de la casa del siglo XXI?

Cubiertas ecológicas

¿Imaginan poder disponer en las azoteas de sus viviendas de bellos jardines, adornados con preciosas plantas y flores completamente naturales? Ello es posible gracias a las “cubiertas ecológicas”, que responden a la imperiosa necesidad actual de cuidar el entorno medioambiental, procurando incluir zonas verdes allí donde es posible incrementar la biodiversidad.

En este contexto, COMPOSAN ofrece a sus clientes, gracias a la labor desempeñada por su Departamento de Investigación y Desarrollo, “cubiertas ecológicas” diseñadas conforme a las últimas tendencias constructivas.

Las “cubiertas ecológicas” son espacios ubicados sobre las viviendas o cualquier clase de construcciones, destinados a ser utilizados como áreas de plantación vegetal con fines estéticos, medioambientales y/o recreativos, con unos requisitos de mantenimiento mínimos y con un carácter ecológico sostenible. Las “cubiertas ecológicas” están formadas por una membrana impermeabilizante –resistente a la posible perforación por raíces de las plantas elegidas y a la presencia de microorganismos-, una capa drenante –pero también con capacidad de retención de agua para ponerla a disposición de las plantas en las épocas de mayor evaporación-transpiración, evitando la instalación de una red de riego-; y una capa vegetal compuesta de sustrato –de entre 4 y 15 cms.- y de las plantas elegidas –se aconsejan las plantas crasas, con buena capacidad de recuperación y una altura inferior a 50 cms-.

Entre los beneficios que aportan las “cubiertas ecológicas” hay que destacar el hecho de que forman una protección duradera frente a los agentes climatológicos externos que acosan a las edificaciones, especialmente el efecto del agua, logrando además el embellecimiento paisajístico de estos espacios infrautilizados como son las cubiertas, y formando una capa termoaislante natural y adicional.

Evitar la contaminación acústica

Como es natural, uno de los aspectos que debe primar en los materiales empleados en las viviendas del siglo XXI es su correcta insonorización, evitando así a sus ocupantes molestos ruidos procedentes del exterior, facilitando así su confort y descanso.

En este ámbito, COMPOSAN ofrece su excelente producto Bricoacustic, desarrollado para el sector de la edificación, y que mejora el aislamiento de una pared de 10 db a ruido aéreo. Su ejecución es rápida, sencilla y limpia, y permite a cualquier particular, instalador, etc. realizar una obra de insonorización en reformas y rehabilitación de viviendas, con un acabado estético.

Otro apartado de gran importancia lo constituye la impermeabilización, muy importante, sobre todo, en terrazas, balcones y cuartos de aseo. En este sentido, es necesario que los materiales empleados resistan al contacto permanente con el agua, a golpes e impactos y posean además una adecuada elasticidad. En el caso de exteriores, resulta fundamental que el material sea resistente a la intemperie y a los rayos UV. Además, debe poseer la cualidad de un secado rápido, incluso a bajas temperaturas, debe poder ser aplicado con humedades elevadas y resistir bien a agentes químicos.

COMPOSAN cubre todas estas exigencias por medio de su producto Compolarte, que consiste en láminas asfálticas de altas prestaciones para recubrir suelo incluso en las condiciones más extremas. Compolarte minimiza el “efecto huella”, tiene un bajo contenido en cenizas y ofrece un gran comportamiento frente al envejecimiento, con mayor durabilidad.

En estrecha relación con la impermeabilización, se encuentra la necesidad de contar con materiales que garanticen el máximo aislamiento térmico, lo cual redunda en un notable beneficio para el medio ambiente dado que, en épocas invernales, se evita la pérdida del aire calentado a través de la calefacción, con el consiguiente ahorro energético.

Frente al reto del agua

¿Y qué decir de la importancia del ahorro de agua? Los nuevos materiales para nuestros jardines permiten disponer de césped decorativo sin coste alguno de mantenimiento. De esta forma, el trabajo conjunto que el Departamento de I+D de COMPOSAN ha llevado a cabo junto a arquitectos urbanos y expertos en jardinería y paisajismo ha dado como resultado una moqueta de césped sintético, lastrado en ocasiones, y según necesidades, con arena y caucho en pequeñas cantidades, denominado Compograss. Este bonito césped ha sido elaborado con un tipo de fibra especial, de gran durabilidad y resistencia a la rotura, dinámico, flexible, agradable al tacto y que a la vez mantiene un aspecto muy natural.

Acerca de COMPOSAN

El grupo Composan tiene su origen en 1925. En la actualidad, su actividad abarca la investigación, diseño, desarrollo, fabricación y distribución de productos destinados a todos los sectores del ámbito de la construcción. Con 248 empleados y fábricas en Valdemoro (Madrid), Huelva y Bilbao, la compañía está presente, no sólo en España –a través de su red de delegaciones en todo el territorio-, sino también en numerosos países de los cinco continentes. La actividad de la compañía se estructura en torno a sus Divisiones: División de Pavimentos Deportivos –líder en el mercado español-; División de Obra Civil –dedicada a la fabricación de juntas y apoyos de puentes (actividad en la que la empresa se sitúa a la cabeza del mercado), rehabilitación de puentes y estructuras de hormigón, impermeabilización de balsas, vertederos y túneles-; División de Geosintéticos; División de Pavimentos Continuos Industriales y Urbanos; División de Impermeabilización y Aislamiento Térmico –que incluye sistemas de drenaje de aguas-, y División de Aislamiento Acústico. Además, la compañía ofrece importantes servicios de valor añadido, como son: garantía, calidad y respeto al medioambiente; experiencia; ingeniería; I+D, información y asesoramiento técnico y prevención de riesgos laborales.

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