Comunicado de Prensa
14 de enero de 2007

HOLO Desarrollo Humano proporciona una visión holística e invita a recurrir al conocimiento para transformar y mejorar el estilo de vida

Una de las preocupaciones más extendidas de la sociedad dinámica que formamos parte es nuestra relación con el cansancio. La vida cotidiana y, sobre todo, la labor profesional en posiciones de responsabilidad -como es el caso de ejecutivos y directivos- sumerge a éstos, con mucha frecuencia, en un estilo de vida que lleva asociado una inevitable sensación de agotamiento. Al tratar problemas del cansancio, la propuesta más frecuente que suele recibir el ejecutivo suele ser un catálogo de ofertas o soluciones como masajes, spas, tratamientos anti-estrés, pequeñas escapadas y viajes para desconectar o, simplemente, la retirada para dormir o no hacer nada.

Sin embargo, como indica Iñaki de Miguel –cofundador de la empresa Holo Desarrollo Humano – compañía dedicada a la organización, gestión y creación de actividades relacionadas con el desarrollo personal- «hay veces que tan solo un cambio de actitud, una disposición al cambio, nos permite vislumbrar un nuevo horizonte para el día a día. Invertir tiempo a conocer bien cómo llegamos a estados incómodos de fatiga nos puede ayudar a transformar y mejorar nuestro estilo de vida».

Las causas que generan agotamiento son múltiples y muchas suelen converger de forma simultánea. Por ello, Iñaki de Miguel –quien es especialista en Psicoterapia Gestáltica y trainer en Programación Neurolingüística (P.N.L.)- propone un sencillo ejercicio de imaginación: «Imaginemos que podemos desplazarnos desde la actividad más frenética en un extremo hasta el descanso absoluto en el otro. Se trata de dos estados polares, contrarios, excluyentes. Supongamos que existe une línea virtual que une ambos polos. Inicialmente nos situamos en el centro de ambos límites. Un muelle virtual en cada lado nos une con cada extremo. Los resortes están en equilibrio en esa postura central».

Una vez situados en esta posición imaginaria, pueden producirse procesos de movimiento por este espacio, en el que los muelles simulan las fuerzas que nos atraen o nos empujan en el mismo. De esta forma, pueden producirse los siguientes estados:

▪ Equilibrio estable– Es el estado quizá más recomendable o energéticamente menos costoso. «Se trata –explica Iñaki de Miguel- de momentos en los que no sentimos de manera especial ni la necesidad de descansar ni la de ponernos en marcha. Podemos vivir en un equilibrio saludable ya que satisfacemos las necesidades de nuestras obligaciones y compromisos adecuadamente».

▪ Equilibrio inestable- En este estado, se incorpora alguna diferencia que altera el estado anterior. Ello puede suceder cuando la persona –en este caso el ejecutivo o directivo con responsabilidades- lleva a cabo una actividad muy decidida: es como si el muelle que la atrae hacia el extremo más activo lo hiciera con especial fuerza; también siente la intensidad del otro resorte. Parece que ninguna de las fuerzas es suficiente como para romper un débil equilibrio. Aunque la persona se sienta desplazada del punto central aún conserva el equilibrio entre ambos polos. Este equilibrio bastante inestable también puede ser identificado en el extremo contrario.

▪ Estabilidad y desequilibrio. Existen otras situaciones más complejas, por ejemplo, cuando la actividad de la persona es completamente desbordante y parece que se ha enganchado a esta forma de estar. «El resorte que nos conecta con mantenernos ocupados –continúa De Miguel- está tan tirante que nos olvidamos del otro polo, o bien nos cuesta demasiado reponernos de tanto trabajo. El desgaste supone un constante deterioro». Del mismo modo, sucede algo similar en el polo opuesto, en el que mantener en exceso un estado de completa inactividad (con estabilidad) durante días o semanas nos lleva a otro tipo de trastorno poco deseable.

▪ Oscilaciones caóticas- Otro escenario frecuente se configura cuando existe un movimiento alocado, frenético desde un extremo al otro; de ida y vuelta constante. De esta forma –explica De Miguel- «el individuo oscila de forma constante, de manera caótica, entre un descanso de urgencia y un despertar muy forzado. La sensación suele ser la de no ser dueño de su tiempo, con un tremendo descontrol. La consecuencia más inmediata lleva a la persona –en este caso al ejecutivo o directivo- a acabar quemada con la dinámica que la domina a diario».

Una vez identificados estos estados, De Miguel subraya cómo el origen del cansancio, si éste supone una alteración en la vida cotidiana del profesional con responsabilidad en la empresa, «se puede abordar como una patología». En este contexto, este especialista apunta a la medicina tibetana, «que nos da pistas para comprender el origen de las enfermedades». Se trataría así de una especie de «salvación a través del conocimiento; si tomamos conciencia sobre el problema, ello ayudará a resolverlo mejor», prosigue De Miguel.

En esta misma línea, Iñaki de Miguel apunta cómo la visión de la medicina tibetana muestra cómo el origen de los males que sufrimos se centra en tres principios:

► Ignorancia– Es muy común que el ejecutivo o directivo detecte que le falta conocimiento sobre cómo llega a sentirse agotado. Así, indica De Miguel, «un grado superior de conciencia sobre estos procesos nos proporciona herramientas para transformar nuestro estilo de vida».

► Apego– «Otra de las causas que provocan la enfermedad –expone De Miguel- es el apego a conductas contaminantes o incluso a remedios poco efectivos. Hay comportamientos aprendidos, hábitos que ni siquiera nos planteamos modificar que nos agotan con frecuencia».

► La Ira– Como explica De Miguel, «los estados de ira a veces son consecuencias y también causas que agravan el problema. Los estados irascibles se realimentan con facilidad; lejos queda una actitud de aceptación, agradecimiento, generosidad, serenidad. No parece sencillo distinguir si la ira nos ciega o al estar ciegos nos encolerizamos». Así, la persona asocia la causa de falta de soluciones efectivas contra el cansancio a una postura colérica e intransigente.

De Miguel concluye con la siguiente observación: «Se trata, en definitiva, de abordar el problema con el cansancio desde una visión holística, con una comprensión desde diferentes ángulos. El resultado se orienta hacia una transformación esencial. No solo se trata de resolver lo que nos molesta o nos oprime. Hay que ver qué ponemos nosotros para contribuir a gestionar mejor nuestro cansancio o nuestra forma de recuperarnos».

Acerca de Holo

Holo Desarrollo Humano es un nuevo espacio dedicado a la organización, gestión y creación de actividades relacionadas con el desarrollo personal (cursos, talleres y otros encuentros), que nace por la necesidad de crear un espacio vivo de búsqueda y encuentros en los que el eje central sea el desarrollo humano y sus implicaciones en la vida personal y profesional, en concreto, en los campos del crecimiento personal, las relaciones humanas, la comunicación y el equilibrio personal.

Holo Desarrollo Humano está integrado por un grupo de profesionales con una amplia experiencia personal, formativa y profesional dentro de este ámbito. Su concepto parte de una visión holística e integradora del ser humano. Las actividades de Holo cubren diversos ámbitos: a) Encuentros vivenciales con técnicas y disciplinas que contribuyen a una mayor conciencia de las potencialidades del ser humano (Gestalt, PNL, Bioenergética, Teatro, Yoga, Tai-Chi, Masaje, Meditación, Trabajo Corporal, etc.). b) Encuentros con maestros y profesionales relevantes dentro del mundo del desarrollo humano. c) Formación en diferentes ámbitos (Proceso Corporal Integrativo y otros). d) Cursos orientados a empresas.

Su ubicación se encuentra en la finca “La Arena”, un lugar privilegiado a menos de una hora de Madrid, que cuenta con 35 hectáreas de paisajes autóctonos y más de 1.500 metros de instalaciones propias. Holo ofrece un completo servicio de alojamiento, cocina y uso de múltiples aulas y salas de trabajo. Se trata de un espacio atractivo donde se ha logrado un equilibrio entre calidez y calidad.

Para más información:
Recursos de Mercado
Tfno.: 91 547 08 04 / 652 09 78 74