Comunicado de prensa
9 de Marzo de 2009

La Acupuntura permite reducir la máximo toda la sintomatología, tanto en su manifestación ocasional como en la perenne

Además de la pérdida en la calidad de vida de las personas que la sufren, la rinitis alérgica supone un 13% en la disminución del rendimiento en el trabajo y provoca también un incremento en los accidentes laborales. En total, los costes directos e indirectos de esta patología suponen 3.500 millones de euros al año en Europa, según se desprende de un estudio, revisado en 2008, de la “Allergic Rhinitis and its Impact on Asthma” (ARIA), organización no gubernamental que colabora con la “World Health Organization”. La Acupuntura puede ayudar a paliar esta situación.

La rinitis alérgica es un fenómeno inflamatorio local desencadenado por un alérgeno externo cuyos síntomas incluyen desde rinorrea (secrección nasal excesiva), estornudos, y picor y obstrucción nasal, hasta fatiga, fiebre, cefalea, apneas del sueño, y alteraciones del gusto, del olfato y de la audición. Además, es el mayor factor de riesgo para padecer asma.

A toda esta sintomatología, hay que añadir la provocada por el propio tratamiento, que puede inducir, según el Dr. Beltrán Carrillo, médico especialista en Geriatría y Acupuntura que lleva ejerciendo como tal durante los últimos 15 años, “a que se produzcan modificaciones en funciones cognitivas y psicomotoras, como son la falta de concentración, la pérdida de coordinación, la disminución de la capacidad receptiva, la lentitud en la toma de decisiones, fatiga, somnolencia… y síntomas físicos tales como el sangrado nasal”.

Las limitaciones para la persona, que se derivan tanto de la propia enfermedad como de la medicación, hacen de la rinitis alérgica una de las causas más frecuentes de absentismo laboral, junto con la depresión. Además, “el empleo de fármacos, en ocasiones, no logra controlar los síntomas del todo”, añade el Dr. Carrillo. En este sentido, el tratamiento con Acupuntura se utiliza “cada vez con más frecuencia en adultos y niños”.

Son muy diversos los estudios que avalan la eficacia de esta técnica en el alivio de los síntomas, debido a que activa el sistema inmunitario y produce diversas actuaciones sobre diferentes aminoácidos y sobre el flujo sanguíneo local en los órganos y tejidos afectados por la rinitis.

Por ejemplo, en un estudio realizado por el Dr. Witt CM sobre 981 pacientes, se les dividió en dos grupos; ambos recibieron el tratamiento habitual pero las personas integrantes en uno de ellos recibieron también diez sesiones de Acupuntura. Se valoró la calidad de vida que tenían al comienzo y a los tres meses, y los costes directos e indirectos en los que incurrieron. En este sentido, aunque el coste total fue mayor en el grupo de la Acupuntura, se considera que el ratio incremental de coste-eficacia la convierte en una técnica beneficiosa para el manejo de la rinitis alérgica.

Otro estudio de 2007 lo realizó el Dr. Xue en Australia sobre ochenta pacientes adultos, divididos aleatoriamente en dos grupos: uno de ellos recibió Acupuntura real y el otro placebo. Se les aplicaron dos sesiones semanales durante ocho semanas y con un seguimiento de doce semanas después del tratamiento. Los resultados fueron los siguientes: disminución mayor de síntomas en el grupo con Acupuntura real que, además, se mantuvo durante más tiempo (más allá de las doce semanas) y necesitó menos medicación sintomática. Ninguno de los dos grupos sufrió efectos secundarios.

También es una técnica eficaz en el caso de los niños, como se comprobó en un estudio realizado en Hong Kong durante 2004 por varios doctores y publicado en la revista “Pediatrics”. La edad media era de once años y comparaban, al igual que en el del Dr. Xue, el efecto de la Acupuntura real respecto a la placebo. En este caso, fueron 85 pacientes que desconocían, tanto ellos como su pediatra, qué tratamiento de los dos estaban recibiendo. Los resultados fueron muy positivos en el caso real: puntuaciones más bajas y libres de síntomas, mejoría inmediata tras la sesión y todo sin efectos secundarios.

Con respecto a la activación del sistema inmunitario gracias a esta técnica, el Dr Li, en 2007, realizó un experimento con cien pacientes divididos en dos grupos: a uno se le aplicó Acupuntura y a otro un antihistamínico oral. Los resultados de los primeros fueron: un 40% tuvo una gran mejoría, un 56% mejoró y un 5 % no obtuvo ninguna respuesta. Por su parte, los tratados con médicamentos tuvieron los siguientes porcentajes: un 32% notó una gran mejoría, un 48% mejoró y un 20% no logró ninguna respuesta.

En definitiva, tal y como se desprende de los resultados de los diversos estudios llevados a cabo y “según mi propia experiencia y la de los pacientes que acuden a Acupuntura para aliviar los síntomas de la rinitis alérgica, podemos afirmar que esta ténica médica es una opción terapeútica eficaz y segura para el tratamiento de la esta patología”, concluye el Dr. Beltrán Carrillo.

Acerca del Dr. Beltrán Carrillo

Licenciado en Medicina y Cirugía por la Universidad Complutense de Madrid, el Dr. Carrillo se especializó en Geriatría aunque, por tradición familiar, terminó decantándose por el ejercicio de la Acupuntura, en la que es Magíster por la misma Universidad. Tras trabajar como geriatra en el Hospital Central de la Cruz Roja, en Madrid, abrió consulta privada de Acupuntura y Geriatría en 1993.

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