Comunicado de Prensa
30 de octubre de 2009

Paciente, experimentado y respetuoso con los demás conductores

El 90% de los accidentes son debidos a una deficiente conducción, por lo que la atención a ciertos consejos previos pueden ser de gran utilidad para evitar tanto accidentes como desagradables multas.

El conductor es el protagonista de la seguridad al volante y sus acciones son determinantes, tanto en su propio vehículo como para el resto de los conductores. La compañía SADYR, con más de 25 años de experiencia en la defensa jurídica y las reclamaciones de accidentes de tráfico, propone una serie de puntos clave que ayudan a fomentar los buenos hábitos al volante y mejoran la actitud en la carretera:

• Aunque nuestro vehículo sea potente, no estamos obligados a demostrarlo en cada kilómetro. A menudo el exceso de velocidad nos impide ver la señalización de ruta, perder un desvío y hacernos pensar que podemos retomarlo con alguna maniobra arriesgada, que concluye con accidente mortal. Está demostrado que las diferencias de tiempo de llegada son mínimas entre altas y medias velocidades.
• Emplear el claxon no clarifica las ideas del conductor que nos antecede. No le ayudará a cruzar antes un ceda el paso, ni aumentará su tiempo de reacción cuando el semáforo cambie. Tampoco volatilizará los cinco vehículos que tenemos delante de nosotros, si hay una carga o descarga. Sólo ayuda a aliviar nuestra ira a costa de acrecentar la tensión ajena.
• Conducir es un acto de responsabilidad y civismo: delatar con insultos las maniobras ajenas incorrectas solo nos lleva a la distracción y a cometer nosotros mismos alguna otra infracción o sufrir un accidente. Los agentes de tráfico son los únicos encargados de sancionar los actos irregulares en la carretera.
• Si el conductor no es un animal salvaje, no debemos considerar la circulación urbana como una jungla. Las infracciones dentro de las ciudades también descuentan puntos y dinero de nuestras cuentas, además de dificultar el tráfico, a todos los demás conductores.
• El adelantamiento es un delicada maniobra que debe ser calculada sobre valores reales de distancia, oportunidad y potencia de nuestro vehículo. La paciencia y el sentido común son factores aún más importantes.
• Mantener la distancia de seguridad, no solo es una recomendación vial, también es una demostración cívica. Acercarse demasiado y durante mucho tiempo es la conducta más irritante que soporta un conductor, según muchas estadísticas, además de ser extremadamente peligroso. Emplear la luz de intermitencia muestra una buena educación vial y nos comunica con el resto de los conductores.
• Es más fácil conducir si prestamos la atención adecuada. No permita distracciones dentro del vehículo, como discusiones con sus ocupantes, o manejo de aparatos electrónicos: dese el placer de conducir sin pensar en contestar una llamada, ni manipular compulsivamente una radio o un navegador. Eliminará el estrés y evitará maniobras bruscas e indeseadas sanciones.
• Los estímulos externos, como el paisaje o la publicidad, colorean la ruta pero pueden ser distracciones fatales, especialmente en largas distancias. Por eso, es aconsejable concentrarse más en el asfalto que en la chica del cartel a un lado de la carretera.
• Ante un viaje largo, la planificación nos puede ahorrar tiempo y hacernos más agradable la travesía, si incluimos los adecuados tiempos de comida y descanso. La fatiga, o una digestión pesada, puede provocar más accidentes que la alta velocidad.
• El alcohol puede desinhibir al conductor y hacerle sentir confiado, pero la realidad es otra: disminuye realmente los reflejos del conductor y distorsiona su percepción. La prueba patente es que el consumo de alcohol está en el 40% de los accidentes mortales.
• Llevar toda la documentación en regla y nuestro vehículo puesto a punto y revisado por la ITV, nos permite afrontar cualquier incidente mucho más confiados, incluso aunque no se llegue a producir tal situación. Lo mismo se puede decir de los obligatorios triángulos de señalización y chaleco reflectante.

En palabras de Vicente Romero, director general de SADYR, “Queremos hacer nuestra pequeña aportación a una conducción inteligente y concienciada. Una conducta cívica en carretera evita muchos sinsabores en carretera, no solo accidentes, sin también onerosas sanciones”.

SADYR es una Compañía de Seguros y Reaseguros, que cuenta con más de 25 años de experiencia en Seguros de Defensa Jurídica. Especializada en el Ramo de Automóvil, presta cobertura al asegurado en procedimientos administrativos, judiciales o arbitrales, en todo el territorio nacional. Asimismo, dispone de una Red de Despachos de Abogados y Procuradores concertados en las principales ciudades de España, además de tramitadores de siniestros que le ofrecen la gestión y asesoramiento jurídico al asegurado.

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Recursos de Mercado – Gabinete de Prensa de SADYR

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